sábado, 19 de febrero de 2011

MUJERES SINGULARES (I): TINA MODOTTI (I)


Assunta Adelaide Luigia MODOTTI, "Tina" MODOTTI
(Udine, Italia, 1896 - México D.F. 1942)



Tina MODOTTI es bien conocida por su magnífica obra fotográfica, realizada casi toda ella en México entre el breve periodo de 1923 a 1930. Allí llegó a principios de los años veinte con el que luego fuera famoso fotógrafo americano Edward Weston y con el hijo de éste. De él aprendió la técnica del arte de la fotografía, y para él posó como en este desnudo de los muchos y magníficos que le hizo el que fuera su maestro y amante.

Tina MODOTTI acabó convirtiéndose en un personaje legendario y mítico, si bien no es hasta los años ochenta cuando grupos feministas estadounidenses la descubren y reivindican, y no sólo y principalmente por su más que meritoria y artística carrera de fotógrafa. También la escritora mexicana Elena PONIATOWSKA, escribe una apasionada biografía sobre ella titulada TINÍSIMA, que era como la llamaba el que, probablemente, fuera su mayor y sin embargo mas efímero amor: Julio MELLA. Corto pero ardoroso amor malogrado por el asesinato de él en los convulsos años finales de la década de los veinte, especialmente en México.


Frida KAHLO fue una gran amiga de Tina MODOTTI. Y aqui podemos verla posando para Edward WESTON.


Tina, además, frecuentaba y compartía inquietudes y proyectos con artistas mexicanos como Diego RIVERA y Frida KAHLO, o David Alfaro SIQUEIROS y Blanca Luz BRUM, entre otros. También la militancia política que, al igual que sus ideas artísticas, acabaron radicalizándose hacia finales de los años veinte, periodo que coincide con la sucesión de revueltas y crisis políticas de México. Es así como llega a militar muy activamente en el partido comunista de México.

****

TINA Y LOS HOMBRES QUE AMÓ


Tina MODOTTI y Roubaix de L´Abrie RICHEY en su luna de miel
***
Roubaix era un prometedor pintor y poeta francocanadiense, con el que se casó a los veintidós años. Él, atraído por la belleza natural de México, viajó allí con frecuencia, contrayendo en uno de los viajes una infección de viruela de la que murió. Tina, que asistió al entierro, quedó fascinada, al igual que antes lo había hecho su esposo, por el abigarrado y tumultuoso movimiento artístico y social que se vivía en México en aquellos momentos. Viuda y sola, hubo de regresar a San Francisco (California) para vivir con sus padres, aunque pronto le surgió la oportunidad para volver a México.



Fue su marido Roubaix quien le presentó al que luego sería su maestro y amante, el célebre fotógrafo americano Edward WESTON. Casado y con cuatro hijos, abandonó a su mujer y, con su hijo mayor, se marchó de Estados Unidos para instalarse en México. Con ellos iba también Tina. Durante bastantes años viajan por todos los rincones del país, haciendo fotografías de los personajes más autóctonos y de los parajes más recónditos. Y, después de varios años y ya de vuelta a la capital, México D.F., descubren que el amor se había marchitado, y Edward vuelve a EE.UU. con su hijo, quedando Tina sola, si bien ya para siempre enamorada de México.



Pronto conoce al artista pictórico Xavier GUERRERO, quien la introduce en los círculos del partido comunista, para acabar siendo una disciplinada militante del ortodoxo comunismo imperante por aquellas fechas, es decir, una entregada estalinista. También se convierten en amantes. GUERRERO era un artista bien representativo del llamado muralismo mexicano de entonces. Al tiempo, sus férreas convicciones políticas le llevaban a viajar muy frecuentemente a otros países, y sobre todo a Moscú. Y fue allí, en uno de esos viajes, donde tuvo conocimiento del abandono de Tina.



Las largas temporadas de Xavier GUERRERO en Moscú, llevan a Tina a conocer a un joven impetuoso revolucionario cubano, exiliado por su oposición al gobierno de Gerardo MACHADO en Cuba. Se llamaba Julio Antonio MELLA. Se conocieron en las manifestaciones celebradas en la ciudad de México, convocadas para protestar por la condena a muerte en EE.UU. de los anarquistas Sacco y Vanzetti. Surgió entre ellos un ardorosa y apasionada atracción, para desembocar pronto en una fuerte relación sentimental. Relación que no llegó a consumarse sino hasta que Tina le envió a Moscú a su amante hasta entonces, Xavier GUERRERO, una desgarradora y sincera carta poniendo fin a su aventura.

Julio también militaba en el partido comunista mexicano, y, su impetuoso temperamento, le llevó a la obsesión de derrocar al régimen cubano una y otra vez. Pero esta aspiración del joven MELLA, no era bien vista por Moscú. Poco tiempo después es expulsado del partido, con acusaciones de revisionismo y fraccionalismo. Acusaciones en las que no faltaron tampoco las de simpatizar con el trotsquismo. Y fue una noche aciaga del 10 de enero de 1929, cuando paseaba con Tina por la esquina de Abrahám Gonzaléz y Morelos, cuando unos desconocidos le dispararon varias veces desde un coche en marcha. MELLA acabó su vida en la fría acera de aquella esquina y en los brazos de Tina.

Nunca se supo realmente quién fue el autor material de la muerte de MELLA, incluso desde el gobierno mexicano (cuya complicidad con el asesinato fue fundadamente sostenida por los círculos políticos), se llegó a acusar a la propia Tina, al encontrar declaraciones contradictorias en sus largos interrogatorios. Pero lo cierto es que, pasados los años, no hay certezas de quién fue el brazo ejecutor de aquel asesinato, aunque no hay duda de que la orden partió de la siniestra camarilla estalinista. Y, aún sin la confesión del propio autor, no parece que haya duda hoy día de que quien ejecutó la orden fue un viejo conocido de ambos amantes: el obediente y fanático estalisnista Vittorio VIDALI. Algunos meses después, Tina y VIDALI se encontraron exiliados en Alemania, y allí se convirtieron en amantes también.



Vittorio VIDALI, viejo amigo y conocido de los amantes Julio MELLA y Tina, era hombre de obediencia ciega a Moscú y fiel representante del estalinismo más feroz. Aunque nunca fue acusado por la policía, en realidad fue el ejecutor material de la muerte del joven revolucionario cubano y amante de Tina. Si bien luego acabó sustituyéndolo, al pasar a ser él el amante de la propia Tina, cuando se encotraron en el exilio en Alemania, una vez que ambos, junto con muchos otros comunistas, fueron expulsados de México. Los dos participarían después en la guerra civil española alistados en las Brigadas Internacionales. VIDALI llegó a ser Comandante del Quinto Regimiento republicano.
***
(continuará)
***
VIDEO TINA MODOTTI
****

lunes, 14 de febrero de 2011

EXISTENCIA


Foto y poema inédito enviados por Jesús DÍEZ FERNÁNDEZ
****


Existencia

Hay un graffiti que el invierno no borra,
sigue escrito en tu vientre espinado.
Hay estigmas arrancando la belleza al subsuelo,
como una cifra en los labios de la reflexión,
como la tiza que ha partido el gemido del mundo.

Frente a nosotros, aguamaniles del alba,
y espejos rotos donde ya es ciega la usura.

Los pintores del miedo, entorpecen las miradas
de los emisarios del sol.
Vuelven a hacer visibles sobre la piel de los héroes,
los tatuajes, las grafías cotizando en bolsa.
Y yo respondo exprimiendo los versos,
sobre la ciudad que murmura tras la niebla.
Y tú rodeas con una almohada de hielo,
los sueños que no hiciste realidad.

Hay goznes invisibles en los que gira
la puerta del silencio.
Se abre y se cierra golpeándome el rostro.
Hay lágrimas de mercurio tras las máscaras,
que cuelgan de las vallas publicitarias.
Hay un pájaro azul pasando las páginas del libro,
haciendo que la nieve crezca sobre la hierba amarilla.

Frente a nosotros, quedan las partituras de jazz,
los deseos mecánicos que rehusamos pautar,
y un tintero donde rebosa la saliva del olvido.
Hay un blues encallado entre los nervios del abismo,
volcán de ceniza que enloquece, nos borra de la existencia.


viernes, 11 de febrero de 2011

BREL, EL ETERNO ADOLESCENTE...


JACQUES ROMAIN GEORGES BREL
(1929-1978)


Brel fue la personalidad más volcánica de la canción francesa


"Viajando, he comprendido que el hombre libre es nómada" J. Brel


"Soñar un sueño imposible...", en el musical de 1968 representando al hombre de la Mancha


La tumba de Brel en la isla de Hiva - Oa, en la Polinesia Francesa, enterrado muy cerca del pintor Paul Gauguin
***
EL ETERNO ADOLESCENTE
***
(Artículo enviado por Kathleen MARTENS)
***
Fue la personalidad más volcánica de la canción francesa. En el escenario, el gran Brel gesticulaba, sudaba, escupía su rabia y sus pasiones con una sinceridad enternecedora. Nació en un barrio de Bruselas el 8 de abril de 1929. Su padre, Romain Brel, era director de una cartonería, y preveía para su hijo un futuro burgués y cómodo. Pero no contaba con el carácter poco disciplinado, soñador y juerguista de su hijo.
Después de muchos fracasos escolares, obliga a Jacques a trabajar en su empresa. En 1950 se casa con Miche, su primera esposa, con la que tiene su primera hija. Brel odiaba aquel trabajo en la empresa de su padre, y ya se sentía atraído por la música.
En 1953, Jacques Canetti, cazador de talentos, lo descubrió en su Bruselas natal y lo invitó a París. Jacques abandona el trabajo que tanto detestaba y marcha solo a la capital francesa. Debuta en el cabaret de Canetti "Aux trois baudets". Su repertorio, un poco místico, y su traje muy estricto, inspiran a Brassens y pronto le llamará el "Padre Brel". Con este apodo se le conocerá durante muchos años, y el debutante tímido Brel encajará dolorosamente los sarcasmos del brillante y ya consagrado Brassens. Sin embargo, con el tiempo, acabarán siendo grandes amigos.
En 1955 se instala en Montreuil, cerca de París, con su familia. Y allí nace poco después su segunda hija. Y es en 1957 cuando nace su famosa canción "Quand onamour". Y es entonces cuando llega su consagración. Recibe el gran Premio de l´Académie Charles Cross. ¿Quién no ha cantado "Ne me quitte pass", "Adieu l ´Emile", "Les bourgeois", "Le plat pays", o la inolvidable "La chanson des vieux amants"?
En 1958 nace su tercera hija, mientras Brel sube al mítico escenario del Olympia y el público reonoce al fin su gran talento. Las giras se suceden a un ritmo infernal. Y, a partir de ahora, Jacques canta dominando totalmente su arte y su fuerte personalidad. En 1960, su nuevo empresario, Charley Marovani, le organiza giras por Estados Unidos, Rusia, Medio Oriente y varias provincias de Francia. Jacques lleva una vida caótica entre las giras, sus numerosas conquistas femeninas, el alcohol y el tabaco.
"Viajando, he comprendido que el hombre libre es nómada. Elijo la libertad antes de que sea tarde", pensaba así y vivió consecuentemente. Y es por estas fechas, los años sesenta, cuando Brel se inicia en su otra gran pasión: la aviación.
En 1967, canta por segunda y última vez en Nueva York. Durante ese viaje asiste a una representación de la comedia musical "El hombre de la Mancha", por la que quedó fascinado y soñando con montarla en Europa. Y es el 16 de mayo del mismo año cuando da su último recital para abandonar los escenarios del music hall por los del teatro y los platós de cine. Su primera película, "Les risque du metier" es bien acogida por el público. Y este mismo año compra un velero; y el virus del espíritu viajero ha nacido para él definitivamente.
En 1968 consigue montar y representar "El hombre de la Mancha", que es recibida y celebrada por todos los medios de comunicación. Desgraciadamente, en 1969, agotado por más de 150 representaciones, tiene que abandonar. Y nadie se siente capaz de reemplazarle. Después rodará dos películas más: "Fantz" y "Le FarWest".
Y es en 1974 cuando le es descubierto un cáncer de pulmón - ¡fumaba cuatro paquetes diarios! Está cansado y desea escapar. Se reune con Miche, su primera mujer, que siempre ha sido su ancla, su confidente, su consejera, y...se lo cuenta. Miche es metódica, organizada y un ejemplo de tolerancia. Cada uno lleva su vida por su lado y nunca se divorciaron, aunque Brel tuvo numerosas relaciones extra conyugales. Una muy tumultuosa con Suzanne Gabrielo. Otra muy discreta con una relaciones públicas de la casa Philips: Sylvie, con quien mantuvo una relación de diez años. Llegó a llamarla su segunda mujer, aunque llevado por otra pasión, la abandonaría definitivamente. Y finalmente con la guapa Maddly Barry, antigua bailarina de Claude Francois, con la que se embarca para irse a las islas Marquises de la Polinesia francesa. En 1976 deciden instalarse allí. Brel vuelve a Francia de vez en cuando, pero en julio de 1978 es trasladado de urgencia al hospital de Bobigny de París, donde fallece.
Está enterrado, por su propio deseo, en la isla que tanto amaba de Hiva-Oa, de la polinesia francesa, muy cerca de otro gran genio: el pintor Gauguin. Exuberante pero también púdico, Brel consiguió el afecto del público. Y artistas de todo el mundo cantan sus obras y seguirán haciéndolo por mucho tiempo, con respeto y veneración por este irrepetible intérprete de canciones inolvidables.

***
Vídeo
Jacques Brel. La Quête. El hombre de la Mancha
***